Las meretrices de Bush en Ginebra
Como si fuera una versión adulterada y poco agradable del
hermoso cuento infantil sobre Blanca Nieves y los Siete Enanos, todo
parece indicar que, en Ginebra, la bruja mala transformó a las pequeñas
criaturas en seres hipócritas y ambiciosos, incondicionales a ella y
dispuestos a compartir el ignominioso papel de detractores de la
verdad. Honduras, Perú, Nicaragua, El Salvador, Nueva Zelanda, la
República Checa y Australia, los siete enanos convertidos en meretrices
de turno del Imperio, se han dedicado a capitanear una moción anticubana
ante el sexagésimo período de Sesiones de la CDH de Ginebra.
Sobre el bochornoso papel asumido por el gobierno
hondureño, encargado de presentar tan repugnante moción, ya reflexioné
en un artículo titulado “Toda la verdad sobre Honduras, el actual
acusador de Cuba en Ginebra”, en el que analizo la carente moral
de este genuflexo gobierno al acusar a la Isla sobre supuestas
violaciones de derechos humanos cuando es uno de los países donde más se
violan los mismos en la actualidad. A nadie sorprendió que este enano
hipócrita y ambicioso fuera el primero en aparecer en el escenario,
cuando Estados Unidos ya preparaba el show contra Cuba. No esperó, en
franca intención por congraciarse con quien promete dádivas por doquier,
que la orquesta anunciara el inicio del espectáculo para aparecer en
escena empujado por el titiritero.
Kira Holmes, secretario asistente del Departamento de
Estado norteamericano, no pudo esconder las complejas maniobras y
presiones llevadas a cabo por su gobierno con vistas a lograr una
condena contra Cuba. Sin remilgos, dijo a varios periodistas: “Estamos
hablando con nuestros aliados no sólo en la Comisión, sino fuera de ella
y en otras reuniones bilaterales para hacerles ver que (la resolución)
es vital”.
Asumiendo luego la misma postura desfachatada, expresó:
“Hemos tenido buenas consultas con algunos gobiernos en América Latina
sobre esa resolución y muchos miembros latinoamericanos de la comisión
tienen una mente abierta (…) Veremos qué pasa. Creo que al final la
mayoría de los países latinoamericanos estarán a la altura de sus
responsabilidades”.
No cabe duda que el señor Holmes pensaba entonces en
mantener las fuertes presiones contra Chile, México, Argentina, Brasil,
Paraguay, Costa Rica, Honduras, Guatemala, Perú y República Dominicana,
los miembros latinoamericanos presentes en la Comisión y quienes, junto
a Cuba, tienen presencia en la misma hasta fines de este año. La misma
coacción la han usado contra las otras 42 naciones miembros presentes
en el CDH en Ginebra.
Por lo pronto, los Estados Unidos lograron mediante
diversas presiones y promesas reclutar a otros seis enanos para
coauspìciar la moción contra Cuba: Perú, Nicaragua, El Salvador,
República Checa, Australia y Nueva Zelandia.
Al conocer esta lista de países confabulados contra la Isla
en Ginebra, le salta a uno la curiosidad por conocer si en ellos existe
razón moral para erigirse en defensores de los derechos humanos y
fundamento para ético para asumir este papel.
¿Qué ha hecho Perú en materia de derechos humanos?
Basta con analizar brevemente algunos datos ofrecidos por
estos días por el Instituto Nacional de Estadísticas e Informática de
Perú (INEI), para ganar en claridad al respecto:
·
La desnutrición afecta actualmente al 35 % de los peruanos.
·
El 54 % de los 26 millones de peruanos vive en la pobreza.
·
El 70 % de los peruanos que enfermaron en los últimos meses no recibió
asistencia médica, acudiendo a remedios caseros ante la imposibilidad de
pagar la atención médica requerida.
·
En el campo educacional, la deserción escolar alcanzó la cifra de 44,1
%.
De acuerdo con un reporte de Reuters Investor, aparecido
el pasado 15 de marzo, la tasa de desempleo en Lima, la capital del
país, creció en un 10,5 % entre diciembre y febrero del presente año.
Por su parte, la Comisión de la Verdad reconoció que Perú
había sufrido la asombrosa cifra de 70 000 muertos en los últimos veinte
años como consecuencia de la violencia institucionalizada en el país.
Un nuevo caso de violación de derechos humanos será visto
próximamente en la Corte Interamericana de Derechos Humanos, entre el 19
de abril y el 8 de mayo, en los que el estado peruano será juzgado por
la muerte extrajudicial de los jóvenes Emilio Moisés y Rafael Samuel
Gómez a manos de miembros de la Policía Nacional de Perú, hecho ocurrido
el 21 de junio de 1991.
Otro caso es el de Lori Berenson, a quien se plantea por
sus abogados se le violaron sus derechos humanos.
Mucho podría decirse entonces de la situación de los
derechos humanos en la nación peruana y cada uno de los hechos y cifras
manejadas invalidarían a Perú como copatrocinador de la moción
anticubana en relación con esta materia.
No caben dudas, pues, que el gobierno peruano debería, en
un gesto de dignidad, evitar lanzar piedras a sus vecinos cuando es
incapaz de resolver los preocupantes problemas sociales que vive el país
y el resto de violaciones de los derechos humanos que padecen sus
ciudadanos.
Nicaragua y su triste historial de pobreza y dolor.
El otro lacayo de Washington en Ginebra ha sido el gobierno
nicaragüense. Sin escrúpulos, Bolaños y su camarilla se unió a la
comparsa anticubana en Ginebra, imitando a su corrupto antecesor.
Causa vergüenza que un gobierno que hace caso omiso a la
imposibilidad de reducir el hambre de sus ciudadanos y es incapaz de
eliminar la alarmante desnutrición que se vive en esta nación, se
dedique a acusar a Cuba de violar los derechos humanos de su pueblo.
Atenazada Nicaragua por males tales como el incremento
desmedido de la pandemia del VIH/Sida, alta incidencia de la mortalidad
materna, propagación de la miseria y la insalubridad, es hoy uno de los
países con mayores problemas sociales en Latinoamérica. La gravedad de
la situación es tan extrema, que el propio gobierno y el Banco Mundial
confirmaron la imposibilidad de que esta nación pueda vencer seis de las
ocho Metas del Milenio, a alcanzarse en el 2015.
¿Qué derechos humanos puede reclamar un país que presenta
la bochornosa de 253 000 niños y adolescentes empujados a trabajar para
poder sobrevivir?
¿Y qué decir de los 800 000 salvadoreños que viven en
extrema pobreza en el país? ¿Y qué de los 2 200 salvadoreños que padecen
tuberculosis y no encuentra solución a su padecimiento?
El Salvador, otro lacayo violador de los derechos de su pueblo.
Los gobiernos derechistas poco han hecho por salvaguardar
los derechos esenciales de sus ciudadanos. Es una vergüenza que 222 000
niños trabajen en condiciones infrahumanas para garantizar su sustento,
alejados permanentemente de la posibilidad de acceder a la escuela.
Un país afectado por las consecuencias de una guerra que no
pudo resolver los problemas sociales históricamente enraizados, padece
hoy por hoy, altos niveles de pobreza extrema, insalubridad,
analfabetismo y exclusión.
Afectado por un 6,3 % de desempleo, la población
salvadoreña padece de males como salarios misérrimos y una gran
explotación patronal.
El gobierno salvadoreño ha sido impotente ante la escalada
de violencia que se vive en ese país, lo que ha provocado un ritmo
asombroso de 210 asesinados cada mes en el último año.
Existen, como vemos, fuertes razones para que el gobierno
salvadoreño sea moralmente incompetente para criticar a otra nación
latinoamericana cuando ha sido incapaz de resolver la permanente
violación de los derechos humanos de sus ciudadanos.
Nueva Zelandia: un oscuro pasado detrás de una bella vidriera.
El gobierno neozelandés se ha sumado vergonzosamente contra
Cuba en la actual campaña capitaneada por la Casa Blanca en Ginebra. Sin
embargo, a pesar de vanagloriarse de los adelantos experimentados en
cuanto a beneficios sociales, Nueva Zelandia tiene un pasado inmediato
bastante oscuro en materia de derechos humanos.
Basta recordar que en septiembre del 2001 el gobierno
neozelandés aplicó una controvertida política de reasentamiento a decena
de miles de refugiados que llegaron al país, reconocidos como tales por
el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR),
a los cuales se detenían de manera arbitraria, siendo sujetos a
procedimientos injustos e inhumanos.
De la misma manera, de acuerdo con las “Observaciones
finales del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales: New
Zealand. 03/01/94”, se reconocen diversas dificultades que provocan
la violación de derechos humanos en el país.
Al respecto se señala, al abordar en el punto C: “Factores
y dificultades que obstaculizan la aplicación del Pacto”.
“11. El Comité lamenta observar que la situación de la balanza de pagos
y las limitaciones presupuestarias han llevado al Gobierno de Nueva
Zelandia a adoptar medidas económicas y sociales restrictivas, lo cual
afecta a la realización de los derechos económicos, sociales y
culturales, particularmente de los grupos más vulnerables de la
sociedad.”
“15. El Comité lamenta que, según la declaración del representante de
Nueva Zelandia, el Estado parte no recoja información estadística sobre
el alcance de la malnutrición, el hambre y la falta de vivienda en Nueva
Zelandia, que serían de magnitud considerable, según lo afirmado por
diversas asociaciones de beneficencia.”
“17. El Comité alienta al Gobierno de Nueva Zelandia a renovar sus
esfuerzos para conseguir la igualdad para la población maorí y de las
Islas del Pacífico, especialmente en lo que respecta al acceso a la
formación profesional y el empleo.”
“18. El Comité insta al Estado parte a que vigile atentamente las
consecuencias que tiene el desempleo y la reducción de los servicios de
bienestar social en la realización de los derechos económicos, sociales
y culturales de los sectores más vulnerables de la sociedad y que adopte
las medidas necesarias para disminuir tales efectos negativos.”
En otro documento: “Observaciones finales del Comité
contra la tortura: New Zealand. 08/05/98”, A/53/44,
paras.167-178. (Concluding Observations/Comments), se reconocen
hechos de violación de derechos humanos de prisioneros en la cárcel
Mangaroa, tal como se expone a continuación:
“Como motivo de preocupación, el Comité ha examinado los casos de
violencia física contra los presos de la cárcel de Mangaroa por obra de
miembros del personal penitenciario. Se ha afirmado que los presos
fueron agredidos por los guardias a puñetazos y patadas, que no
recibieron el debido tratamiento médico y que fueron privados de
alimentos y de lugares adecuados de detención. Aún cuando estos hechos,
que habrá de determinar la investigación en curso, no se pueden
considerar como casos de tortura, se puede hablar ya de trato cruel y
degradante.”
La República Checa, peón asalariado de Washington.
Siguiendo su bochornoso historial de lacayo de oficio de Washington, la
República Checa se ha prestado nuevamente a capitanear una resolución
anticubana en Ginebra. Buscando complacer a sus amos y congraciarse con
los sectores más conservadores dentro de la Unión Europea, los checos se
involucran en la tradicional cruzada contra Cuba, olvidándose que su
tránsito al capitalismo no ha beneficiado a sus ciudadanos. Prueba de
ello es el aumento de la tasa de suicidios en el 2001 aumentó al 35 %,
casi un 20 % más que con respecto a 1991.
Según
la sicóloga Libuse Lovasová, reseña Radio Praga, la mayoría de los
casos que deciden abandonar este mundo son personas del sexo masculino.
La especialista considera que el motivo principal del incremento de la
cantidad de suicidios es que la agitada época actual requiere que cada
individuo asuma una mayor responsabilidad por su propio destino. La
incapacidad de algunos ciudadanos de asumir esa responsabilidad puede
desembocar en serios problemas psíquicos, que muchos tratan de resolver
con el suicidio, sostuvo la experta. La verdad es otra, el capitalismo
y la inseguridad que genera, es la principal causal de este fenómeno.
Otro mal que azota a los ciudadanos checos es el desempleo. Según
especialistas, cuando en enero pasado el paro en la República Checa
alcanzó el 10,8 por ciento, los analistas hablaban de una tasa récord de
desempleo en la historia del país, afirmando que a partir de entonces
ésta comenzaría a bajar. No obstante, los cálculos de los especialistas
resultaron erróneos, ya que el desempleo continuó creciendo, llegando a
superar el pasado mes el 10,9 por ciento. El paro afecta a 570 800
ciudadanos checos en edad productiva. La peor situación se registra en
el norte de Bohemia y Moravia.
Como vemos, estos problemas sociales a los que se suman la
discriminación que viven los gitanos, las fallas en la seguridad
social, el aumento de la criminalidad y otros, atentan contra los
derechos de los ciudadanos en el país. Estos asuntos, por supuesto,
debían ser foco de atención de los gobernantes checos si estuvieran
interesados en mejorar las condiciones de vida de su pueblo.
Sin embargo, poco puede esperarse de estos anticomunistas furibundos y
representantes de la ultraderecha. Odian a Cuba y siempre están
dispuestos a asumir la primera línea de ataque, por vergonzosa que ésta
sea.
Australia, el nuevo peón en Ginebra.
De Australia poco puede decirse, salvo este sospechoso papel asumido en
esta vigésimo sexta sesión de Ginebra. Presidente actual de la CDH, dio
un primer paso de complicidad al desoír las acusaciones de los
representantes cubanos sobre la presencia de un terrorista, Luis Zúñiga
Rey, en la delegación norteamericana en Ginebra. Poco después, por arte
de magia, se alinearía junto a los enemigos de Cuba.
Las causas de la actuación de Australia hay que buscarlas más atrás. Un
alineamiento junto a Estados Unidos en su “lucha antiterrorista”
demuestra que el gobierno conservador australiano busca, primero que
todo, servir de peón incondicional de Washington en el Pacífico Esperar,
para ver nuevos pasos de Australia en el mundo y, por supuesto, siempre
al lado de los representantes de las fuerzas más retrógradas en el
mundo. Se olvidan los australianos de las negras y reprobables
actuaciones contra los indígenas, lo que ha representado una de las
páginas más repudiables en cuanto a violación de derechos humanos en el
siglo XX. Este pasado y presente de abusos, traiciones y vergüenzas,
invalidan a Australia para erigirse en “defensora” de los derechos
humanos.
Conclusiones:
Estas son las meretrices actuales de Bush en Ginebra. Movidos por
razones diferentes que no excluyen el entreguismo y la sumisión, hoy
atentan contra la verdad al endilgar a Cuba las mismas acusaciones que
esgrimen sus tradicionales enemigos.
La votación vendrá, es cierto, y puede ser que por estrecho margen
validen una moción anticubana cargada de diatribas y falsedades. Los
cubanos y sus verdaderos amigos conocen la verdad: en Cuba no se violan
los derechos humanos. Por el contrario, este es un país de humanos con
derechos. Lo demás viene sobrando.